ESRUZA
ESRUZA
Él trajo a mi vida El Nayar.
El Nayar y Él, una misma cosa.
Amor y pasión haciendo una conjunción;
olas de un mar embravecido.
Pero fue sólo un sueño
que se convirtió en dolor
al pasar el tiempo.
El dolor se irá algún día
junto con el amor y la pasión.
Sólo será un agridulce recuerdo
varado en mis días de fríos amaneceres.
El Nayar y él, ráfaga de un sueño inconcluso
que se desvaneció en el tiempo,
tiempo en el que me quedé varada,
como un barco sin timonel
en un mar de amargas confusiones.