ESRUZA

Mis noches cálidas de otros días

hoy son sólo hielo en el silencio

de este campo que habito, y que ahora seco está.

Por eso quiero decir, con lágrimas en los ojos,

que ya no quiero evocar el rumor del Nayar

entrando y saliendo de mi playa solitaria

Momentos mágicos que alegraban mi existir,

cuando creí haber encontrado mi alma gemela,

y era feliz, porque no me soltaba de su abrazo,

aunque no pudiera verla a los ojos.

Mas de repente, algo sucedió,

ya no escucho el rumor del mar,

no existe mi alma gemela,

fue un sueño que inventé.

No acabo de entender por qué pasan las cosas.

Amenaza lluvia, el cielo está gris, y los truenos

penetran mi ser como queriendo romperlo.

Mi campo seco está, pero la lluvia hará que

reverdezca, mi corazón… ya no.

Por eso, quiero decir con lágrimas en los ojos,

que las noches son insomnes, y aunque no quiera,

vienen evocaciones que duelen.

El rumor del mar desaparece en esas noches largas

esperando el amanecer.

Dos almas y dos soledades haciéndose compañía, qué ironía,

porque no existía nada, sólo fue lo que quise creer.

Ahora, los días pasan silenciosos viviendo mi soledad,

aprendiendo a disfrutarla.

Sólo ella y yo, inseparables compañeras.

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