DESPEINADAS
Mi padre, una vez me contó una historia de porque cumplía años a diario:
Hija, dime ¿Qué alcanzaste hoy día?, Veo tu carro, tu hermosa casa, veo la mía, te veo a ti, creo que eres lo único que ha valido la pena en la vida y créeme que no soy el mejor, pero vamos a ciegas en este mundo.
Nunca te has preguntado que frágil fuiste en ese sueño de anoche donde Dios vuelve a darte el despertar y diciéndote que aún cree en ti.
He pasado años buscando la felicidad hija mía y siempre la he cargado conmigo, soy una oportunidad y una maldición, soy un milagro y un error, soy yo con todo lo que tengo y sin nada más que dar que lo soy.
Tu eres la demostración que Dios es perfecto, me hizo ser Dios creándote y yo buscándolo en los rincones, pidiéndole me muestre señales y aquí te tengo respirando y aceptándome con la peor versión de mi, frente a la mejor versión de mí, tú.
Por eso al verte, cumplo años a diario.